TIERRA
ARRASADA
IV.
FMI
O
TRENES.
USTED
DECIDE.
No
se
puede
quedar
bien
con
Dios
y
con
el
Diablo
en
forma
simultánea
sobre
todo
si
este
ultimo
no
quiere.
Esa
es
más
o
menos
la
situación
del
Estado
frente
al
Ferrocarril
San
Martín,
por
un
lado
la
nueva
sociedad
de
concesionarios
denominada
UGO
que
más
que
hacerse
cargo
del
problema
juega
al
distraído
al
no
tener
más
remedio
que
hacerse
cargo
de
una
tarea
en
la
que
las
ganancias
son
por
lo
menos
muy
magras.
Por
otro
lado
los
compromisos
con
el
FMI
que
inhiben
al
gobierno
de
alcanzar
soluciones
de
fondo,
como
sería
por
ejemplo
reestatizar
la
línea
y
recrear
la
Empresa
Estatal
de
Ferrocarriles.
Por
otro
lado,
el
tercero
en
discordia,
Metropolitano
(Taselli),
se
frota
las
manos
mientras
espera
el
efectivo
traspaso
de
la
línea
a
manos
del
UGO
o
de
quien
sea
para
poder
iniciar
acciones
legales
y
cobrar
una
suculenta
indemnización
como
consecuencia
del
desprolijo
acto
de
desadjudicación.
A
nuestro
criterio
el
fallo
de
la
Dra.
Vidal,
cuando
denegó
al
Estado
la
posibilidad
de
la
recesión
del
contrato
estuvo
correcto,
por
la
simple
razón
de
que
el
decreto
de
Emergencia
Ferroviaria
exime
de
cualquier
responsabilidad
a
los
concesionarios,
y
dicho
decreto
sigue
aún
hoy
vigente.
Decreto
éste
que
además
de
la
inacción
propia
deja
totalmente
inerme
a
la
CNRT
al
privarla
de
toda
norma
legal
para
accionar
sobre
los
concesionarios.
Además
de
lo
expuesto
la
transferencia
al
UGO
del
San
Martín
constituye
lisa
y
llanamente
un
delito,
ya
que
se
trata
de
una
adjudicación
directa
de
una
explotación
y
de
un
sinnúmero
de
obras
que
habrá
que
realizar
para
que
este
ferrocarril
pueda
seguir
funcionando.
C.N.S.T.
La Plata, 26 de octubre de 2004