TIERRA
ARRASADA
III
FMI
O
TRENES.
USTED
DECIDE.
Uno
de
los
aspectos
más
preocupantes
de
la
actual
situación
del
San
Martín
y
su
futuro
inmediato
es
la
condición
de
sus
casi
1.400
trabajadores
y
su
futuro
probable.
Desde
el
Estado
se
les
ofrecerá
una
continuidad
laboral
precaria
hasta
que
el
UGO
se
encuentre
en
función
y
luego
una
inmensa
mayoría
de
estos
trabajadores
quedará
en
la
calle
o
en
condiciones
de
trabajo
infinitamente
peores
a
las
que
ahora
tiene.
No
es
un
secreto
que
el
UGO
(Unión
transitoria
de
TBA,
Metrovías
y
Ferrovías)
es
por
lo
menos
una
explosiva
combinación
de
intereses
mutuos
cruzados
y
que
terminará
tan
pronto
como
alguno
de
estos
concesionarios
pueda
fagocitarse
a
los
otros.
Tampoco
es
un
secreto
el
mínimo
entusiasmo
presentado
por
estos
concesionarios
en
hacerse
cargo
del
paquete
del
San
Martín.
Y
menos
secreto
aún
es
que
piensan
tercerizar
absolutamente
toda
la
operación,
siendo
varios
los
postulantes
a
esta
partida,
entre
otros
la
desplazada
GIP
ALSTHON.
Los
trabajadores
del
San
Martín
por
su
parte
presentan
distintas
posturas,
algunos
entienden
adecuadamente
el
problema
y
piensan
que
la
única
salida
posible
es
el
paso
al
Estado
de
toda
la
operación
del
San
Martín,
otros
en
cambio
se
miran
en
el
espejo
de
la
UEPFP
y
creen
que
tendrán
mejor
futuro
con
las
privatizadas.
En
este
momento
no
es
un
problema
menor
las
elecciones
de
la
Unión
Ferroviaria,
donde
los
verdes
de
Pedraza
sostienen
que
no
hay
mejor
mundo
posible
que
las
privatizadas,
lo
mismo
que
Maturano
y
Caminos
desde
la
Fraternidad.
La
experiencia
muestra,
sin
embargo,
que
el
mundo
es
y
será
tal
y
como
seamos
capaces
de
construirlo,
y
así
sin
duda
es
para
los
trabajadores,
en
aquellas
empresas
que
los
trabajadores
ferroviarios
han
reconquistado
sus
sindicatos
(Subte,
TBA
por
ejemplo)
las
condiciones
de
trabajo
son
mejores
que
en
aquellas
donde
los
traidores
de
siempre
mantienen
la
conducción
gremial
Para
nosotros
la
posibilidad
de
recuperar
el
Ferrocarril
excede
al
problema
de
los
trabajadores
y
creemos
que
seria
posible
un
país
mucho
mejor
con
los
ferrocarriles
en
manos
del
Estado
que
en
manos
de
los
actuales
concesionarios.
Pero,
lamentablemente
no
todos
tenemos
la
misma
sensibilidad
frente
al
problema
de
la
pobreza
y
la
exclusión
que
ha
generado
el
neoliberalismo
en
nuestro
país,
y
lo
que
es
más
triste,
algunos
trabajadores
no
terminan
de
entender
que
el
problema
no
termina
en
el
salario,
las
privatizadas
son
pan
para
hoy
y
hambre
para
mañana
para
los
trabajadores
y
para
todos
los
argentinos,
aunque
hoy
transitoriamente
paguen
un
mejor
salario.
Falta
ahora
saber
como
reaccionarán
los
compañeros
trabajadores
del
San
Martín
para
encarar
este
problema,
si
oirán
las
voces
de
sirenas
verdes
o
si
se
enfrentarán
a
las
mismas
en
su
beneficio
y
en
el
de
todos.
C.N.S.T.
La Plata, 26 de octubre de 2004