Miembro fundador del MONAREFA
Por el país a todo
tren.
LOS
PUEBLOS TIENEN DERECHO A VOTAR, NO A CAMBIAR DE POLÍTICA
Anne
KRUEGER (Directora General Adjunta FMI)
Le
Monde Diplomatic. Enero 2005.
Dos días después del accidente de Palermo, el Juez de
la causa allana las oficinas de TBA en busca de elementos que esclarezcan los
hechos del choque de trenes.
Fundamentalmente lo que el Juez requisó son las cintas
que guardan la comunicación entre el conductor del tren y el cabín de control
de señales.
Pero lo realmente grave de este asunto no es que si el
señalero le dijo o no al conductor que podía transponer las señales, lo gravísimo
de este hecho es que ha quedado flotando la sensación de que el equipo de radio
del tren ha estado reemplazando al sistema de señales.
Esta práctica no es monopolio de TBA ni mucho menos,
todas, absolutamente todas las empresas de transporte ferroviario de cargas han
desmantelado los sistemas de señalamiento electromecánico y se manejan con
bloqueos a través de la radio.
Metropolitano tiene puentes de señales anulados que no
reemplaza, pero que hace que su falta se sienta menos a través de los equipos
de radio en los trenes.
Esta práctica es infinitamente más peligrosa que el
uso de las señales y los palos starf de la época de ferrocarriles argentinos,
pero es una práctica enormemente más barata que aquella, y una más de las
razones de la dificultad para implementar los servicios de pasajeros
interurbanos.
El uso del bloque por radio podría ser aceptable en el
caso de los trenes de carga, pero es absolutamente inadmisible para los
servicios de pasajeros, mucho menos en corredores donde la cadencia de trenes es
del orden de uno cada tres minutos como en el ramal siniestrado.
Como decíamos en artículos anteriores, el fantasma
del síndrome Ingles o del Cromañón ferroviario, como gustan llamarlo los
compañeros del MO.NA.RE.FA, ha sobrevolado sin duda al accidente de Palermo.
La pregunta que nos hacemos ahora es cual será la
actitud de las autoridades, sobre todo desde la Secretaría de Transporte, si
implementar medidas que obliguen a las privatizadas a utilizar adecuadamente los
sistemas de señales y demás protocolos de seguridad, o como hasta ahora,
seguir con la emergencia ferroviaria, decreto mediante, y mirar para otro lado
esperando que cuando las condiciones vuelvan a repetirse, Dios esté atento y
evite nuevamente la catástrofe.
C.N.S.T.
La
Plata, 15 de marzo de 2005