12 de Octubre

NUESTRA
SEÑORA DEL PILAR

Doble de Primera Clase - Ornamentos blancos

   Cuenta una piadosa tradición que, estando el Apóstol Santiago el Mayor cierta noche en oración a las orillas del Ebro, se le apareció la Santísima Virgen María, viviendo aún en carne mortal, para consolarles y esforzarle a proseguir en España su obra de evangelización, y que allí mismo le mandó construir un templo en honor suyo, como lo hizo, ayudado de algunos discípulos. Este templo vino después a convertirse en la actual basílica del Pilar, centro de grandes peregrinaciones.
   Virgen bendita del Pilar, guarda a tu España en medio de los vaivenes y a despecho de los ataques de sus enemigos, pues tu bendito Pilar, gastado de besos, cifra sus inconmovibles esperanzas. Mira por esta raza hispano-americana, que ha dado al mundo tantos varones ilustres y al cielo tantos Santos.

   Introito

    INTROITUS Salve sancta Parens, eníxa puérpera regem: qui caelum terrámque regit in saécula saeculórum. Ps. 44, 2. Eructávit cor meum verbum bonum: dico ego ópera mea Regi. V. Gloria Patri.    IntroitoSalve, santa Madre, que pariste virginalmente al Rey que rige cielos y tierra en los siglos de los siglos. - Ps. Mi corazón exhaló una bella canción: al Rey le dedico mis obras. V. Gloria al Padre.

Oración-Colecta

   ORATIO - Omnípotens sempitérne Deus, qui per gloriosíssimam Filii tui Matrem caeléste praesídium nobis mirabíliter praeparasti: concéde propítius; ut quam peculiári t´titulo de Colúmna pia devotióne venerámur auxilio. Per eúndem Dóminum.

   R. Amen 

   Omnipotente y sempiterno Dios, que maravillosamente nos preparaste celestial defensa en la gloriosísima Madre de tu Hijo: concédenos propicio que, venerándola con piadosa devoción con el especial título del Pilar, seamos protegidos con su perpetuo auxilio. Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.

   R. Amen.

        Epístola

EPISTOLA

   Lectio Libri Eccli. (XXIV, 14-16)  - Ab initio, et ante saecula creata sum, et usque ad futurum saeculum non desinam et in habitatione sancta coram ipso ministravi. Et sic in Sion firmata sum et in civitate sanctificata similiter requievi et in Hierusalem potestas mea. Et radicavi in populo honorificato et in parte Dei mei hereditas illius et in plenitudine sanctorum detentio mea.

 

   Desde el principio y antes de los siglos ya recibí yo el ser, y no dejaré de existir en todos los siglos venideros; y en el Tabernáculo santo cité el ministerio mío ante su acatamiento. Y así fijé mi estancia en el monte Sión, y el lugar de mi reposo fue la Ciudad santa, y en Jerusalén está el trono mío. Y me arraigué en un pueblo glorioso, y en la porción de mi Dios, la cual es su herencia; y mi habitación fue en la plena reunión de los santos(1).
   GRADUALE - Benedicta et venerábilis es, Virgo María: quae sine tactu pudóris invénta es Mater Salvatóris. V. Virgo, Dei Génitrix, quem totus non cápit orbis, in tua se clausit víscera factus homo. 

   Alleluia, alleluia. V. Post partum, Virgo, invioláta permansísti: Dei, Génitrix, intercéde pro nobis, Alleluia.

   GradualBendita y venerable eres, Virgen María, pues sin el más leve menoscabo de tu integridad virginal llegaste a ser Madre del Salvador. V. Oh Virgen, Madre de Dios, Aquel que no cabe en todo el orbe, hecho hombre, se encerró en tu seno. 
   Aleluya, aleluya - V. Después del parto permaneciste Virgen intacta; Madre de Dios, intercede por nosotros. Aleluya. 

Evangelio

 

USequéntia sancti Evangélii secúndum Lucam (11, 27-28)

   In illo témpore: Loquénte Jesu ad turbas, extóllens vocem quaedam mulier de turba dixit illi: Beatus venter qui te portavit et ubera quae suxisti. At ille dixit: Quinímmo beati qui audiunt verbum Dei et custodiunt  illud.

Credo.

 UContinuación del Santo Evangelio según San Lucas   En aquel tiempo: Hablando Jesús al pueblo, levantó una mujer la voz de en medio del concurso y le dijo: Bienaventurado el vientre que te llefó, y los pechos que te amamantaron. Pero Jesús respondió: Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios y la ponen en práctica.  Credo
   OFFERTORIUM - Luc. 1, 28 et 42 - Ave, María, grátia plena; Dóminus tecum: benedícta tu in muliéribus, et benedíctus fructus ventris tui.    Ofertorio -  Dios te salve María, llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita eres entre todas las mujeres; y bendito es el fruto de tu vientre. 

Oración-Secreta

   Tua Dómine, propitiatióne, et beatae Maríae semper Vírginis protectióne, ad perpétuam atque praeséntem haec oblátio nobis proficiat prosperitátem et pacem. Per Dóminum.     Aprovéchenos, Señor, esta oblación, para que por tu gracia y por la intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, logremos la dicha y la paz en esta vida y en la eterna. Por J. N. Señor.

   Prefacio de la Sma. Virgen   

  Vere dignum et justum est, aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus: Et te in Festivitate Pilar beátae Maríae semper Virginis collaudárae, benedícere et praedicáre. Quae et Unigénitum tuum Sancti Spíritus obumbratióne concépit: et virginitátis glória permanénte, lumen aeternum mundo effúdit, Jesum Christum Dóminum nostrum. Per quem Majestátem tuam laudant Angeli, adórant Dominatiónes, tremunt Potestátes, Caeli, caelorúnque Virtútes, ac beáta Séraphim, sócia exsultatióne concélebrant. Cum quibus et nostras voces, ut admítti júbeas deprecámur, súpplici confessióne dicéntes: 

   Sanctus, Sanctus, Sanctus...

   Verdaderamente es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios. Y el alabarte, bendecirte y glorificarte en la fiesta del Pilar de la bienaventurada siempre Virgen María, que, habiendo concebido a tu único Hijo por virtud del Espíritu Santo, dio a luz, conservando siempre la gloria de su virginidad, a la Luz eterna, Jesucristo nuestro Señor. Por quien los Ángeles alaban a tu Majestad, las Dominaciones la adoran, y las Potestades la temen. Los Cielos y las Virtudes de los cielos, y los bienaventurados Serafines celebran juntos tu gloria transportados de mutuo regocijo. Haz, Señor, que unamos nuestras voces con las suyas diciéndote con humilde confesión: Santo, Santo, Santo, etc.
   COMMUNIO - Beáta víscera Maríae Virginis, quae portavérunt aetérni Patris Filium.    Comunión.Bienaventuradas sean las entrañas de la Virgen María, que llevaron al Hijo del eterno Padre.

Oración-Postcomunión 

   Sumptis, Dómine, salútis nostrae, subsídiis: da, quaesumus, beátae Maríae semper Vírginis patrociniis nos ubíque prótegi; in cujus veneratióne haec tuae obtúlimus majestáti. Per Dominum.    Habiendo recibido la prenda de nuestra salvación, haz, Señor, que merezcamos ser amparados en todo lugar y tiempo con la protección de la bienaventurada siempre Virgen María, en cuya memoria hemos ofrecido este sacrificio a tu Majestad. Por Jesucristo Nuestro Señor.

      


  • (1) Como el Verbo, que es la Divina Sabiduría, la Virgen María se presentó desde toda la eternidad al pensamiento de Dios y así como residió en el tabernáculo de Jerusalén, así también residió en María, que es Madre del Verbo encarnado. (volver)