En Valencia sé esta
realizando un gran estudio de recuperación del palomo valenciano de raza
antigua.
Desde mi infancia,
siempre he admirado el palomo valenciano de raza antigua. Viendo como el
transcurrir de los años este lamentablemente iba desapareciendo, creándose un
palomo más acorde, con la prisa de las prisas de los aficionados así se ha ido
aligerando el palomo antiguo creando un palomo mas apretado en el pilot y más
quedado en la parada. Esto ha traído consigo que se pierda el palomo de belleza
y de trabajo. Que era un gran seductor que tanto ha dado que hablar a todos los
aficionados antiguos, en bien de este por los grandes trabajos que este palomo
realizaba. Pero sin volver la vista atrás este tipo de palomo ha ido
desapareciendo.
Pero yo privándome de
ir a ver la suelta durante años me he dedicado a recuperar la raza antigua, así
como cuentos documentos antiguos, libros, fotografías y palomos. Todo esto me
ha dada una gran satisfacción ya que en este momento, poseo palomos, los cuales
están dando un gran ejemplo de su trabajo en los picaderos que se están
probando. Sin tener nada que envidiar a los actuales palomos, mostrando estos
mejor talla en constancia al lado de la paloma sin abandonarla, y cerrando estos
en su cajón la mayoría de veces a esta.
Yo considero que el
palomo valenciano alcanzó su plenitud de valía allá por los cincuenta, cuando
al final de la tarde se creaba una gran lucha entre ellos, para conseguir
llevarse la paloma a su palomar, siempre había uno de ellos que lo conseguía,
siendo este el ganador y el orgullo de su dueño.
En Játiva existía un convento de frailes Franciscanos, llamado el Convento de Santo Domingo. En dicho convento vivió un fraile llamado Antonio Laudi, este mencionado fraile se dedico mas de cuarenta años al estudio y observación de los palomos buchon de apeo valenciano, mensajero carrier y el magañ, y el azul de la estrella. Estos dos últimos autóctonos valencianos hoy en día ya extinguidos, así como el buchon de apeo valenciano, cruzándolo con el azul de la estrella. Y consiguiendo al mismo tiempo un color que él habito que vestían los mencionados frailes Franciscanos. El pionero del palomo valenciano de vuelo Antonio Laudi, confecciono un manuscrito durante mas de cuarenta años en el convento y dicho manuscrito mas tarde fue propiedad de Don Miguel Albalat y Gonzalvo siendo este seños abogado y perteneciendo este a una familia acomodada de Játiva.
Este señor Albalat, era maestros de los maestros de esta clase de arte y
deporte.
A pesar de los años existe esta raza de palomos muy bien conservada de la
cual poseo algunos ejemplares, así como de otras líneas de palomos valencianos
antiguos. Los aficionados aun le siguen llamando a los palomos de color ahumado
Franciscanos en algunos pueblos de Valencia sobre todo los mas ancianos.
Mis respetos y admiración al pueblo de Játiva ha sido la pionera en este
tipo de arte o deporte. Siendo sus escritos más antiguos que los del
naturalista Cabanilles, que menciona en su historia natural de las palomas
valencianas.
Francisco Linares Ponce
España, Valencia ,1992