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El Argentinosaurus

El dinosaurio herbívoro más grande del mundo —que habitó en suelo argentino— deslumbrará a grandes y chicos en los Estados Unidos. Una réplica completísima de ese animal prehistórico está siendo construida en el Museo de Historia Natural Fernbank, en la ciudad de Atlanta.

La estrella de la muestra es el argentinosaurio, hallado en Neuquén en 1987. Dos años después empezaron los trabajos de extracción de sus restos, que aún se conservan en el Museo Carmen Funes, de Plaza Huincul. La réplica de este animal prehistórico está acompañada por el giganotosaurio, un gran carnívoro que pesaba unas 8 toneladas. Ellos forman parte de la exposición "Gigantes de la Era Mesozoica", que está montándose desde el 2 de marzo en el museo Fernbank. El museo fue inaugurado en 1992 y financió la construcción de las réplicas, con un costo de 1,25 millón de dólares.

En comunicación con Clarín por correo electrónico, William Bevil, el responsable de la exhibición, justificó la elección de los animales: "Son representativos del excitante trabajo paleontológico que se realiza en la Patagonia argentina. Además, como en el museo tenemos dinosaurios de nuestra región pero de la misma época que las réplicas de la Argentina, nos permiten mostrar las conexiones entre los continentes".

Las réplicas de los dinosaurios se mostrarán como si estuvieran en su ambiente originario, dentro de una gran sala. "Servirá para capturar la imaginación de los visitantes, alentar a que aprendan más sobre la paleontología y para que tengan una mejor comprensión de la historia de nuestro planeta y sus diferentes formas de vida", afirmó Bevill.

Los curiosos visitantes quedarán inmersos dentro de la siguiente escena: verán al carnívoro giganotosaurio dando un ataque sorpresivo al enorme argentinosaurio (o Argentinosaurus huinculensis, su nombre científico). A ellos se sumarán dos pterosaurios Anhanguera, otros animales de la misma época.

El montaje de la exhibición empezó el 2 de marzo al colocarse una protección en el piso de la sala y al señalar la distribución del armazón. Después, seguirá con los distintos huesos de los animales. Los últimos en ubicarse serán las manos y las patas.

Se podrán encontrar también pisadas y huellas de restos fósiles y una senda que llevará a observar a las especies de plantas y animales que también existían hace unos 90 millones de años, durante la era mesozoica.
 

El argentinosaurus en dibujo

 

El argentinosaurus en teorial



En esa era geológica —que transcurrió entre 240 y 65 millones de años atrás aproximadamente— hubo cambios sobre la Tierra. A principio de esta era se desarrollaron los dinosaurios pequeños, los ictiosaurios y los pleirosaurios. Más tarde, dentro del período jurásico de la misma era geológica, aparecieron los dinosaurios gigantes —como el argentinosaurio— y los ptesaurios.

Al final de la era mesozoica se produjo la extinción del 70% de los organismos vi vos del momento, incluyendo a los dinosaurios. Aún se discute el porqué de semejante cambio, aunque la hipótesis más firme hasta el momento es que un gran meteorito que cayó en México produjo una gran destrucción. Tampoco está claro por qué los dinosaurios más gigantescos se desarrollaron en América del Sur específicamente y no en los otros continentes.
Mientras las hipótesis sobre su desaparición en el mundo siguen discutiéndose entre los paleontólogos, estos animales continúan llamando la atención de todo el público. Sus características tan singulares quizá sí pueden explicar tanto entusiasmo.

El argentinosaurio perteneció a la familia de los saurópodos. Llegó a pesar 100 toneladas y tenía un largo de 40 metros. Como herbívoro, su dieta estaba compuesta por vegetales, a los que alcanzaba moviendo su cuello largo. Helechos, palmeras y coníferas eran parte de su menú diario.

En tanto, el giganotosaurio (o Giganotosurus carolinii) es un terópodo que fue descubierto por Rubén Carolini en 1993, en Neuquén. Este dinosaurio vivió 100 millones de años atrás. Y aunque era más pequeño que el dinosaurio estrella de la muestra, se estima que tenía en su mente al argentinosaurio (o a las crías de éste) como una de sus comidas favoritas.
 

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